A veces me acuerdo de ti como un viejo y borroso momento de mi infancia. Y me acuerdo de las cosas más tontas. Me acuerdo de ti y de cómo dolías. De cómo nos dió por disfrutar la vida. De cómo colocabas mis pies encima de los tuyos y bailábamos con Bob Dylan de fondo. O de cómo nos comprábamos las gafas más ochenteras de la tienda y todavía nos creíamos normales. Me acuerdo de cómo se me volaba la falda y lo único que hacías era reírte de mi. Aunque después volvías, me decías al oído que me querías, y yo como una tonta te comía la boca. Pero la vida está para eso, ¿no? Para comernos la boca hasta cortarnos los labios, para comer helado en pleno invierno, para cantar tu canción preferida caminando por la calle, para sobarnos y para dormir juntos. Y lo hicimos, creeme, lo hicimos. La vida pasó de nosotros y nosotros de la vida. Pasamos de pensar, de preocuparnos por el qué diran, por el qué debo hacer y pasamos al qué nos apetece. Y que nos tachen de irresponsables pero tú y yo fuimos felices. Y la vida nos debe una porque le enseñamos a pasar el tiempo. Le enseñamos al mundo cómo se debe de vivir. ¿Y qué si ya no estamos juntos? La vida nos separó porque no podía más. Pero algún día tú y yo nos vengaremos. Y volverás para cogerme de la cintura como solías hacer. Para dibujar en mi espalda, para mertete en mi estómago, para dejar de temblar, para dejar de tener miedo, para dejar de ver a esa gente tirar sus días a la basura y ni si quiera volver por si acaso sí servían. Volverás y será como la sensación de leer un libro por segunda vez. O mejor, será como leer un poema de nuevo, entendiendo cada verso, cada suspiro transformado en letra. Será como darte cuenta de que un libro te ha hecho llorar, de que ni si quiera te sentías protagonista, o de que sentías más lástima por el asesino que por la víctima. Yo no tengo miedo. Dolíste mucho pero ya no te tengo miedo. Porque cuando has conocido la felicidad sabes que todo lo puede. Puede a la vida, a la muerte, al sueño, a la magia, incluso a la poesía. También a la poesia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario