como en un libro abierto...

- Escúchame esta vez, por favor.
+ ¿Por qué debería escucharte? No me apetece discutir.
- Porque no quiero discutir. No quiero tener la razón. Tampoco quiero no tenerla; quiero que no haya más razón que admitir que todo el mundo merece una segunda oportunidad. Quiero que veas cómo me trago mi orgullo, palabra a palabra. Quiero que me escuches para decirte que lo que te dije era verdad, que eres diferente, que yo también lo soy. Quiero que me escuches para pedirte perdón, y para que tú sepas comprenderme. Quiero que me escuches para decirte que en poco tiempo has conseguido hacer que te eche de menos. Quiero que me escuches para decirte que si me encontré contigo en esta vida es por algo, y que por algo será que no puedo tratarte como uno más o uno menos. Quiero que me escuches para que nos des una oportunidad, para que te preguntes qué podría ser. Quiero que me escuches para decirte que, por muy cabezota, orgullosa, bocazas y tonta que yo sea, puedo ser muchas más y mejores cosas. Quiero que me escuches para poder decirte al final del todo que sí, que me gustas, idiota.