Más cerca de los Beatles que de tus discos de jazz.

.

domingo, 24 de enero de 2016

J

Qué duro es decirte adiós. Qué duro es empezar a escribir algo que sabes cómo acabará. Qué duro es escribir algo para que después encaje con un perfecto "gracias, te deseo lo mejor en esta vida". Pero yo nunca fui de encajar, tú y yo fuimos siempre de salirnos del molde. De besarnos después de gritarnos durante diez minutos, y de reirnos de todo lo serio que pueda haber en esta vida. No puedo resumir absolutamente nada de lo que tú y yo hemos vivido. Tal solo puedo decir que ya quisieran muchos. Que ya quisieran conocer el amor tal y como yo lo he conocido detrás de tus ojos. Solo puedo decir que siempre me pararé en cada lugar que hicimos nuestro y que sonreiré. Que siempre podré de decir que existen personas que te completan y que cuando se van dejan tu vida patas arriba. Que existen personas que te desean buena suerte en tu examen a las siete de la mañana, y personas que te secan las lágrimas mientras te sueltan lo fea que estás cuando lloras. Y que te hacen reir, que te hacen reir hasta cuando no quieres soltar ni una palabra. Que existen personas que te pegan un post-it en el techo para que lo veas cada mañana. Que llegan a tu vida y hacen que las cosas sean de otro color. Que los problemas se conviertan en retos y las derrotas en experiencias. Existen personas que te regalan una tableta de chocolate el día de tu cumpleaños. Que te ponen tu canción preferida a las doce de la noche en una playa. Y que te besan. Y no como alguien cualquiera, sino como ese tipo de personas que no te dejan indiferente. Ese tipo de personas que solo se conocen una vez en la vida. Para mi suerte o mi desgracia yo la conocí cuando tan sólo tenía quince años. Todavía no conocía el amor y conocí a esa persona. Y qué gilipollez eso de que hay mil peces en el mar. Qué gilipollez el creer en las almas gemelas. Qué gilipollez el creer que no hay nada que sea para toda la vida. Tú eres para mi el resto de mi vida. Tú serás esa persona por mucho tiempo que pase. Porque nunca nadie me besara al mismo tiempo que se rie como lo haces tú. Nunca nadie sabrá cómo hacerme reir en tan solo unos segundos. Tú eres para mí y yo soy para ti. Encantada de regalarte este pedacito de mi. Encantada de coincidir en esta vida. Encantada de tenerte conmigo siempre, aunque tú ya no estés. Tú eres para mí, y yo siempre seré contigo. Cuando te ahogues. Cuando necesites ser tú mismo. Cuando necesites esta parte de ti. Yo siempre estaré. No te deseo lo mejor en esta vida, porque sé que tú mismo puedes conseguirlo. Siempre juntos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario