"Estaba realmente guapa" se susurraba mientras ella entraba en aquel lugar con su sonrisa en la cara, su ron en una mano y su mejor amiga en la otra.
Pero, ¿sabes qué?, había otra evidencia que no todo el mundo tuvo en cuenta: Sus ojos, tan negros con esa pintura rosa alrededor, tan sólo enfocaban a una persona, a otros ojos negros.
Él estaba loco, loco por pasárselo bien y loco por sus ojos también; realmente era difícil no estarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario